El 23 de julio ha dado comienzo la etapa de operación del Nuevo Complejo Fronterizo Los Libertadores. La concesión fue adjudicada en marzo de 2015 a Concesiones de Infraestructuras Chile Uno S.A. (100% participada por Iridium) por la República de Chile. El inicio del diseño y construcción de la obras por importe de 59 millones de euros tuvo lugar en mayo de ese mismo año.
Las instituciones chilenas han tomado posesión del complejo y han iniciado su traslado al mismo iniciándose así una etapa de pruebas para su definitiva apertura al público en tres meses.
Desde la fecha de inicio de la operación el concesionaria tiene derecho a la percepción de la remuneración por operación de la infraestructura, que consiste principalmente en prestar los servicios de mantenimiento y conservación de las obras, limpieza y gestión de residuos, alimentación, lavandería, comunicaciones, gestión de equipajes y de información a los usuarios principalmente y gestión de la vialidad invernal en el complejo.
El puesto fronterizo se ubica a casi 3.000 metros sobre el nivel del mar en territorio chileno en la ruta que une Mendoza, en Argentina, con la Región de Valparaíso, en Chile. El Complejo, construido por Dragados, está constituido por tres edificios principales situados en una plataforma de hormigón de 40.000 m2 destinada al tránsito de los vehículos. Estos edificios albergarán tanto el control fronterizo como el edificio residencia para los funcionarios de la Subcomisaria del Cuerpo de Carabineros de Chile con una superficie total construida que supera los 35.000 m2.
El diseño y ejecución de la obra a esta altitud ha supuesto constantes desafíos entre los que destacan la cubierta del edificio principal de madera laminada y preparada para soportar una sobrecarga de nieve de 1.400 kg ,y trabajar por debajo de los 15 grados bajo cero.
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